Felipe VI comienza "una monarquía nueva para un tiempo nuevo"

Un acto que se ha producido esta mañana tras la abdicación de Juan Carlos I. Felipe VI acompañado por su esposa y ya Reina Letizia Ortiz y las Infantas Leonor y Sofía. También le han acompañado su madre Doña Sofía y su hermana Elena, ausente su padre, Don Juan Carlos I.

Todo el emiciclo estaba representado por los Diputados, Senadores, además de haber asistido los Presidentes de las Comunidades Autónomas, y por supuesto los padres de la constitución.

En su discurso el Príncipe insistía en  que su monarquía será renovada para un tiempo nuevo, además de recordar la figura de sus padres durante su reinado de 39 años, “quiero rendir un homenaje de gratitud y respeto hacia mi padre, el Rey Juan Carlos I. Un reinado excepcional pasa hoy a formar parte de nuestra historia con un legado político extraordinario”.

El Rey Felipe VI indicaba a los Diputados y Senadores que comienza un reinado de un Rey Constituciones que respetará la separación de poderes y cumplirá las leyes aprobadas por las Cortes Generales, siempre colaborando con el Gobierno Central. “No tengan dudas, Señorías, de que sabré hacer honor al juramento que acabo de pronunciar; y de que, en el desempeño de mis responsabilidades, encontrarán en mí a un Jefe del Estado leal y dispuesto a escuchar, a comprender, a advertir y a aconsejar; y también a defender siempre los intereses generales”.

Felipe VI ha hablado sobre la independencia de la Corona y ha defendido su neutralidad política y su labor integradora ante las diferentes ideologías, lo que ha supuesto una estabilidad del sistema político español y facilitar el equilibrio de los órganos constituciones y territoriales.

Felipe VI insistía en que la Corona debe buscar la cercanía con los ciudadanos, “ganarse su aprecio, su respeto y su confianza para velar por la dignidad de la institución y preservar su prestigio” y consideraba que el Rey como cabeza del Estado tiene que ser un referente y un servidor de la exigencia de los ciudadanos. “Éstas son, Señorías, mis convicciones sobre la Corona que, desde hoy, encarno: una Monarquía renovada para un tiempo nuevo. Y afronto mi tarea con energía, con ilusión y con el espíritu abierto y renovador que inspira a los hombres y mujeres de mi generación”.

El nuevo Monarca quiso recordar a las víctimas del terrorismo, a todos los que la crisis les ha golpeado y añadía “Tenemos con ellos el deber moral de trabajar para revertir esta situación y el deber ciudadano de ofrecer protección a las personas y a las familias más vulnerables. Y tenemos también la obligación de transmitir un mensaje de esperanza -particularmente a los más jóvenes- de que la solución de sus problemas y en particular la obtención de un empleo, sea una prioridad para la sociedad y para el Estado. Sé que todas sus Señorías comparten estas preocupaciones y estos objetivos”.

Tras este recuerdo, el Rey miraba al futuro con una España renovada “que debemos seguir construyendo juntos al comenzar este nuevo reinado”. Además indicaba que los hombres y mujeres de su generación aspiran a revitalizar las instituciones y fortalecer la democracia, Felipe VI quiso que los ciudadanos y sus problemas sean el eje de las acciones políticas.

“Deseamos una España en la que los ciudadanos recuperen y mantengan la confianza en sus instituciones y una sociedad basada en el civismo y en la tolerancia, en la honestidad y en el rigor, siempre con una mentalidad abierta y con un espíritu solidario”.

“Aspiramos a una España en la que se puedan alcanzar acuerdos entre las fuerzas políticas sobre las materias y en los momentos en que así lo aconseje el interés general”.

Para finalizar el Rey deseaba que no se rompan nunca los puentes del entendimiento que nacieron con la Constitución.

El Rey Felipe Vi se quiso despedir en Castellano, Catalán, Euskera y Gallego.

Tras este acto el Rey Felipe Vi, la Reina Letizia y las infantas Leonor y Sofía se trasladaron al Palacio Real en una comitiva por las calles que unen el Congreso con el Palacio y salieron al balcón para saludar a las personas que se han concentrado en la Plaza de Oriente.