El papel de la asesoría integral en la sostenibilidad y transparencia de fundaciones y asociaciones

La gestión de una fundación o una asociación va mucho más allá de llevar a cabo actividades que estén alineadas con su misión objetivo. Por su naturaleza jurídica y su papel social, estas entidades deben cumplir con una serie de obligaciones legales, económicas, fiscales y de buen gobierno que determinan su sostenibilidad y credibilidad.

 

Mantenerse al día en normativa, justificar correctamente subvenciones, elaborar presupuestos realistas o asegurar la transparencia financiera son tareas que precisan de un alto nivel de especialización, del que no siempre dispone la propia organización. Por ello, cada vez más entidades del tercer sector buscan un servicio de asesoría externa capaz de ofrecer una visión integral y rigurosa.

 

La creciente profesionalización del ámbito no lucrativo ha dejado claro la necesidad de contar con equipos expertos en materias como la contabilidad adaptada a las normas específicas de fundaciones y asociaciones, fiscalidad, contratación pública, redacción de estatutos, auditoría, planificación estratégica y gestión documental.

 

En este sentido, contar con una asesoría de fundaciones y asociaciones profesional y especializada se vuelve fundamental, ya que no solo facilita el cumplimiento de las obligaciones, sino que además reduce riesgos, mejora la eficiencia y fortalece la confianza de financiadores, instituciones y de la ciudadanía.

 

 

¿Por qué las asociaciones y fundaciones necesitan asesoramiento especializado?

 

A diferencia de las empresas privadas, las asociaciones y fundaciones se rigen por normativas específicas que pueden variar significativamente entre comunidades autónomas y que, además, se actualizan frecuentemente. A esto se suma que muchas organizaciones del tercer sector participan en convocatorias públicas de subvenciones o contratan servicios con las administraciones, lo que exige tener un profundo conocimiento del marco jurídico y económico del sector público.

 

En este contexto, la asesoría fiscal de fundaciones se convierte en una herramienta clave. Este servicio no consiste únicamente en resolver dudas puntuales, sino también en contar con un acompañamiento continuo que ayude a prevenir incumplimientos y a tomar decisiones informadas.

 

Estas son algunas de las áreas más valoradas al contratar una asesoría integral para asociaciones y fundaciones:

 

• Contabilidad específica para entidades no lucrativas.
• Fiscalidad, incluyendo exenciones, obligaciones del régimen especial y presentación de modelos tributarios.
• Contratación pública, especialmente importante para entidades que licitan proyectos o gestionan servicios.
• Gestión de subvenciones, desde la solicitud hasta la justificación económica y técnica.
• Gobernanza y cumplimiento normativo, garantizando la transparencia y el buen funcionamiento de los órganos de gobierno.

 

 

El rol de los especialistas en la asesoría del tercer sector

 

El acompañamiento profesional a fundaciones y asociaciones debe proceder de equipos que conozcan en profundidad las particularidades del sector no lucrativo. En los últimos años, en España ha crecido enormemente la demanda de asesorías especializadas que combinan experiencia jurídica, fiscal y económico-financiera, dado que muchas organizaciones requieren soluciones que conecten estos ámbitos y no tratamientos aislados.

 

En este sentido, es importante destacar que dentro de la asesoría especializada en el tercer sector existen perfiles con experiencia directa en administración pública y en gestión de entidades sin ánimo de lucro. Este doble conocimiento facilita que el asesor comprenda los procesos administrativos, las exigencias documentales, los criterios de fiscalización y las particularidades que afectan a estas entidades.

 

Este es el caso de Life Sector Público, que de la mano de sus CEOS, Sara Fernández Ceballos e Ignacio González Rivera, representa a la perfección esta combinación de experiencia, posicionando a la firma dentro de la línea de asesorías que integran una visión jurídica, económica y administrativa del sector público y del tercer sector en su conjunto.

 

Asesoría especializada para un cumplimiento más riguroso

 

Las entidades del tercer sector deben responder a una trazabilidad de fondos mucho más estricta que otros modelos organizativos, especialmente cuando se trata de gestionar recursos procedentes de subvenciones o contratos públicos. Esto implica disponer de sistemas de control y de justificación extremadamente precisos.

Es habitual que organizaciones pequeñas o medianas, con recursos limitados, tengan dificultades para asumir internamente responsabilidades como:

 

• Elaborar memorias económicas ajustadas a lo que exige cada convocatoria.
• Gestionar correctamente los gastos financiables y los criterios de imputación.
• Preparar auditorías externas obligatorias para determinadas fundaciones.
• Redactar estatutos o reglamentos de régimen interno conformes a la normativa vigente.
• Actualizar sus procedimientos internos para cumplir con novedades legislativas.

Por este motivo, muchas recurren a asesorías especializadas, que ofrecen un acompañamiento total desde la creación de la entidad hasta su actividad diaria, pasando por la presentación de cuentas y el cumplimiento de obligaciones documentales.

 

 

Transparencia y sostenibilidad: claves para el futuro del tercer sector

 

La confianza pública es uno de los pilares esenciales de las fundaciones y asociaciones. Tanto los financiadores privados como las instituciones públicas exigen cada vez más garantías de transparencia, medición de impacto y buena gestión financiera. Una asesoría integral no solo facilita estos procesos, sino que también ayuda a desarrollar estructuras más sólidas y sostenibles con el paso del tiempo.

 

Aquí, contar con especialistas permite que la entidad pueda centrarse en su misión social, dejando en manos de profesionales la parte normativa, económica y documental. Este equilibrio es imprescindible para mejorar su capacidad de acción, su credibilidad y su acceso a financiación pública o privada.

 

En definitiva, la asesoría integral se ha convertido en un recurso imprescindible para fundaciones y asociaciones, que permitirá que puedan desarrollar su actividad con seguridad jurídica, estabilidad económica y una gestión transparente acorde a las expectativas del sector y de la sociedad.