Miguel de Lucas muestra el camino hacia la felicidad en el Teatro Reina Sofía de Benavente

La felicidad…. Qué concepto más concreto y a la vez con tantas definiciones, cada persona ve el camino hacia la felicidad de una manera y la define de muchas. En ocasiones ser felices lo podemos tener al alcance de nuestras manos, bien dando la importancia a aquellos pequeños momentos que se te quedan en la memoria, o viendo salir a tu hija, hijo al escenario del Teatro Reina Sofía de Benavente con Miguel de Lucas, y automáticamente en el rostro de sus familiares se dibuja una sonrisa avanzando en ese camino hacia la felicidad.

Y eso es lo que ha intentado transmitir esta tarde Miguel de Lucas en Benavente, con un espectáculo denominado ‘La felicidad no es un destino, es un camino’, enlazando diferentes número de magia e ilusión y durante una hora, Miguel de Lucas ha transitado por mensajes llenos de ilusión, emoción, amor y empatía. Quizá sean la clave de combate de todo aquello que resta y no suma en la vida, quizá sea el momento para que los pequeños vean en los mayores los cuatro pilares para formarse como un buen ser humano, o quizá es darle la vuelta a esos pensamientos intrusivos con esas cuatro premisas, algo que ha querido quedar reflejado en el público que llenaba el patio de butacas y algunas localidades de la platea y primera planta del Reina Sofía.

Miguel de Lucas a través de varios ejercicios mágicos hacía partícipe al público benaventano, tanto adulto como infantil, estos últimos con mayor facilidad para participar en el espectáculo creando una sintonía entre el ilusionista y el patio de butacas, con su especial característica de humor cercano y cariñoso hacia los asistentes benaventanos que siempre le acogen con esa especial conexión que consigue en cada espectáculo.

El final de ‘La felicidad no es un destino, es un camino’ te hace reflexionar sobre tí mismo, porque la mejor compañía es la persona que te acompaña siempre y ese siempre eres tú. Miguel de Lucas ha conseguido de nuevo crear un espectáculo de ilusión para mirar la vida con emoción y poder experimentar el amor y ser capaces de tener esa empatía para llegar a la felicidad y continuar transitando por este camino. Ojalá sea así.