La UD Bovedana Femenino consigue salvar un punto ante el Olímpico de León

Desde los primeros compases se hizo evidente el plan del Olímpico, que cedió la posesión a las locales para presionarlas en la zona central, buscando robar el balón y defender con orden, marcando de cerca a las jugadoras más peligrosas del conjunto zamorano.

La Bovedana controló el esférico, pero sus ataques carecieron de profundidad. La desgracia llegó en el minuto 17: un disparo aparentemente inofensivo de Inés, desde el lateral izquierdo, se le escapó de las manos a Vega y terminó dentro de la portería local.

Pese al mazazo, las jugadoras dirigidas por Sergio Mata continuaron fieles a su plan, confiando en las acciones de desmarque y regate de Viki, quien, pese a su habilidad, apenas lograba superar a sus defensoras. Cuando conseguía centrar, sus envíos eran interceptados por la zaga visitante, y en la primera mitad el equipo apenas generó un par de ocasiones claras de gol.

En la segunda parte, el Olímpico perdió el respeto inicial a la Bovedana y comenzó a tener más posesión y presencia en el área de Vega. No obstante, en el minuto 59, Bermejo, con fe y decisión, condujo el balón por la banda derecha hasta la línea de fondo y sirvió un pase atrás —el conocido "pase de la muerte"— que María Ojeda aprovechó para enviar un disparo raso inalcanzable para Pili, la portera visitante.

El tanto dio alas a la Bovedana, que se lanzó con más ímpetu que acierto a por el triunfo. El juego, sin embargo, se volvió trabado, con numerosas faltas y pérdidas constantes de balón. Fruto de esta dinámica, el colegiado Diego España se vio obligado a mostrar varias tarjetas, siendo María Ojeda la más perjudicada al ver la segunda amarilla y dejar a su equipo con diez jugadoras.

A partir de la expulsión, el Olímpico tomó el control del encuentro y dispuso de varias ocasiones peligrosas, pero Vega emergió como la gran salvadora del equipo local con intervenciones decisivas. Aun así, la Bovedana también encontró espacios para lanzar rápidas transiciones, con protagonismo de Viki, Sofía, Bermejo y Somara, que obligaron a Pili a intervenir con acierto en varias acciones.

En los últimos minutos, el cansancio hizo mella en ambos conjuntos y el partido se convirtió en un querer y no poder. El marcador ya no se movería.

Al término del encuentro, el técnico visitante Ricardo Melón ofreció una valoración ajustada a lo visto sobre el césped: "Sabíamos que aquí nos esperaba un partido muy complicado. Llevábamos toda la semana preparándolo. Ha sido un duelo intenso, de tú a tú. Ellas empezaron muy fuertes, jugando en casa, y eso siempre es difícil, pero poco a poco nos fuimos adaptando. Con la expulsión de su jugadora intentamos buscar el segundo gol, aunque al final creo que el empate es bastante justo".