El escritor Víctor del Árbol pregona la XXVI Feria del Libro en Benavente “los libros no van a morir nunca”

Con un cambio de ubicación debido a las obras de renovación de los Paseos de la Mota, la Feria del Libro es fiel a la cita con sus lectores y continúa siendo uno de los eventos más esperados del verano benaventano. En esta edición que ya suma su número veintiséis, las casetas se han instalado en los Paseos de Soledad González, o como se le conoce habitualmente, la Mota Vieja.

Una feria donde el calor será el protagonista, a lo largo de estos días se prevé que los termómetros rocen los 40 grados, en plena alerta naranja, por eso los libreros y editoriales que no han querido faltar a la cita se equipan de agua fría y seguramente algún ventilador.

Hoy ha sido el día de dar el pistoletazo de salida de esta feria, lo ha hecho Víctor del Árbol, escritor novelista ganador del premio Nadal en el año 2016.

El turno de intervenciones comenzaba con la directora del Centro Cultural Soledad González María José Pérez quien echaba la vista atrás y recordaba los inicios de esta feria, creada por ella de manera humilde, con mesas de colegio se daba a conocer las obras literarias. Poco a poco y año a año la feria ha ido creciendo, cogiendo nombre en la provincia y ahora es uno de los referentes literarios de la zona “es una cita consolidada en nuestro calendario cultural que convierte durante estos días nuestra ciudad en un punto de encuentro para la lectura, la imaginación, el diálogo en torno a los libros” expresaba la directora de la biblioteca

En el acto ha estado presente el Presidente en funciones de la Diputación de Zamora y Diputado de Cultura Víctor López. El representante de la Institución Provincial ha destacado que esta feria es un símbolo de la ciudad “ en Benavente se lee mucho y que las librerías venden mucho, pues es síntoma también de una sociedad que cree y que apoya la lectura y la cultura, y estamos muy orgullosos de que se haya logrado”.

López animaba a los lectores y a la ciudad a que se siga con su apuesta por la lectura, por los autores nacionales “pero que lo hagáis también desde la base apoyando fundamentalmente a los libreros, que también mantienen un negocio y una forma de vida que hay que mantener, que son los libros”.

La Alcaldesa de Benavente, Beatriz Asensio mostraba su reconocimiento a la organización de la Feria del Libro de la ciudad “Hoy es un día de celebración porque las calles de Benavente se visten de letras, de historia, de poesía, de imaginación y de pensamiento. Damos comienzo a una nueva edición de la Feria del Libro, que es un espacio de encuentro para autores, para lectores, entre ideas y emociones, entre lo que somos y lo que soñamos ser.”

La primera edil benaventana fue la encargada de presentar al pregonero de esta edición, un autor con un éxito de seguidores benaventanos, siendo uno de los escritores con más demanda en la Biblioteca de Benavente “su obra es de reconocido prestigio, tanto a nivel nacional como internacional.  Ha conseguido algo que no es fácil, que es llegar al gran público sin renunciar a la profundidad, a la belleza del lenguaje y a la complejidad del alma humana”. 

Víctor del Árbol confesaba que no era muy dado a discursos porque considera que los libros tienen que hablar por sí mismos “tienen que hablar con el lector”.

El escritor comenzaba su discurso destacando el esfuerzo organizativo de la feria “tiene que ser fruto de la voluntad y eso significa que se ha convertido en una seña de identidad en esta ciudad, en su gente, y que se ha convertido en un compromiso valiente y decidido por los libros y por la cultura  donde yo creo que tiene que estar, que es en la calle,  que es de mano en mano, que es en la vida común de la gente del pueblo”. 

López echaba la vista atrás, recordaba sus inicios con la lectura, siendo un rebelde de las literatura, sobrescribiendo esos libros que sacaba de la biblioteca porque no le convencía su redacción “El vicio de hacer anotaciones en los márgenes de subrayar las frases o pasajes que me llamaban la atención, sigo haciéndolo, porque creo que los libros con arrugas y cicatrices demuestran que son vividos, aunque eso, por supuesto, los inhabilita en mi caso para ser prestados, porque cada libro que yo tuviese que prestar significa que prestaría también parte de mi actividad,  entonces lo que hago es regalarlos. Cuando esos libros soy yo quien los pide prestados o cuando los sacaba de la biblioteca, eso suponía un problema”.

Cada lector tiene un libro que le ha marcado en el caso de Víctor del Árbol “Cuando yo leo un libro, no importa si es novela o ficción o poesía o teatro,  lo que quiero es precisamente volver a sentir la fascinación que sentía de niño, cuando el tiempo desaparecía, cuando el espacio se transformaba ante mis ojos asombrados”.

Por todos estos argumentos y durante su discurso, Víctor del Árbol daba por inaugurada oficialmente la feria del libro teniendo claro que los libros “no van a morir nunca”.
 

La jornada se completó con la presentación del libro de Mercedes G Rojo “Faustina Álvarez García”, la firma de ejemplares de ambos autores y un recital de poesía a cargo de Notting Hill Cultural.