Intensidad taurina y un herido por asta por uno de los toros de los Condes Duques

A las seis de la tarde, dio comienzo el recorrido del vallado urbano, donde dos novillos —Garlito, de la Ganadería Aurovemar, y Abogado, de la Ganadería Javier Pérez Tabernero— fueron toreados en la zona de arena tras la suelta desde el cajón y luego conducidos hacia el Toril ante la expectación del público. Sin embargo, la celebración se vio alterada cuando Garlito embistió a un corredor en el cruce de la Avenida Donantes de Sangre.

El herido fue trasladado de inmediato al hospital de campaña, donde la reconocida cirujana Marta Pérez López, premio Castilla y León de Tauromaquia y profesional del Hospital Virgen de la Concha, intervino de urgencia. Según explicó la doctora, el corredor sufrió una cornada en la axila con afectación pulmonar al chocar el cuerno con la quinta costilla, además de un puntazo bajo la escápula derecha que le rompió el músculo. También presentaba policontusiones, una herida incisa en la nariz, otra en el parietal y una fisura en el codo.

Mientras se atendía al primer herido, el quirófano móvil recibió a otro joven, alcanzado por la vaquilla Bellísima, de la Ganadería Antonio López Gibaja, organizado por la asociación No Te Metas. El afectado sufrió una herida incisa, con pronóstico leve.

La jornada taurina culminó con el II Encierro de Novillos, donde ejemplares de la Ganadería Antonio López Gibaja recorrieron el vallado urbano, cerrando una tarde que dejó tanto adrenalina como momentos de preocupación.