"Por Voluntad Propia" de Teatro Perigallo: Un dúo actoral desafiando la realidad, basándose en la ficción

Reportajes: Angela Carrasco Jueves, 03 de Octubre de 2024 Tiempo de lectura:

“Por Voluntad Propia”, la segunda obra de esta mitad de año en el Teatro Benaventano, mantuvo la línea temática de su predecesora (Los amigos de ellos dos): un dueto actoral

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En esta ocasión la propuesta de la compañía Teatro Perigallo, desafió los límites de la realidad y la ficción, invitando a la introspección y al desafío de las propias verdades del escaso público que se dio cita la noche del pasado domingo. La atmósfera teatral estuvo impregnada de pura filosofía psicológica.

La puesta en escena inició con dos personajes sin nombres ni identidad, sumergidos en un "espacio fuera del tiempo", donde su existencia parecía dictada por fuerzas externas, manipuladas por los guionistas ausentes.

Estos personajes, que posteriormente serian llamados P1 y P2, (personaje uno y dos), descubrieron su identidad en el transcurso de la historia, planteando temas filosóficos y reflexiones psicológicas sobre la naturaleza de la realidad, la identidad y el absurdo de la vida. Negados a conformarse con ser manipulados, comienza una lucha por la búsqueda de su autenticidad, la cual logran con la no aceptación del odio, y el amor, como único motor de cambio.

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La riqueza dramática de Celia Nadal y Javier Manzanera, quienes no solo interpretaron sino también escribieron el texto, fue innegable. Bajo una acertada dirección, (de Luis Felpeto), lograron dotar de una autenticidad y profundidad a una obra que, aunque atípica, ha recibido críticas excepcionales desde su primera aparición en marzo de este año.

La obra convierte objetos cotidianos en símbolos profundos: una gran aguja y el hilo, se transformaron en metáforas de las preguntas y respuestas sobre el destino y el verdadero propósito de la vida de los personajes. De igual modo, los dos grandes espejos, diseñados por Juan de Arellano, Pepe Hernández y Eduardo Manzanera, se erigieron como las únicas conexiones con otra realidad, y un reflejo de la búsqueda existencial de los personajes.

La música en vivo, interpretada por los propios actores, (Ella con sus preciadas castañuelas, y él con el ukelele), aportó un componente orgánico que intensificó la experiencia escénica.

Las percusiones disonantes y cortas se convirtieron en la banda sonora del desconcierto y la confusión de los personajes ante un mundo que no comprendían.

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Los efectos lumínosos de Pedro A. Bermejo y Francisco Martínez fueron simplemente hipnóticos. Las lámparas de papel adornadas con mariposas representaron, de forma poética, las verdades que los personajes reconocen en sus momentos de iluminación.

Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando, al termino de la obra, tras recibir una ovación del público y agradecer la presencia del público, los actores invitaron al escenario a los benaventanos Emilio del Prado y su esposa Charo, miembros del Grupo de Teatro Aficionado Senderos, para agradecer el constante apoyo que han brindado cada vez que esta compañía se presenta en el Reina Sofía de Benavente.

Concluyo a modo de reflexión con una de las líneas del texto: “La real identidad, la búsqueda del verdadero propósito, hace que para los que vivimos en la ficción, el viaje valga la pena”.

FICHA ARTÍSTICA POR VOLUNTAD PROPIA