“No te olvidaremos nunca”, las campanas doblan por Toño en Santa Cristina en el día del patrón de los campaneros

El funeral, oficiado por el párroco de la localidad, D. Pascual Villalón junto al sacerdote D. Raúl Vega, fue un emotivo acto de despedida hacia un hombre muy vinculado a la iglesia como sacristán. El párroco, visiblemente emocionado, hizo un repaso a la trayectoria de José Antonio, conocido como Toño, tanto en su labor como sacristán, de quien dijo que era una persona que “siempre estaba”, destacando su entrega y el mimo con que trataba la iglesia. “Era un manitas, siempre estaba dispuesto y disponible. Vamos a extrañarlo mucho”, dijo el sacerdote. “Para mí ha sido una gran persona, es lo que quiero mantener vivo de él”, asegurando que era una de las personas más conocedoras de Santa Cristina de la Polvorosa, de su historia y de sus gentes, aunque nunca realizó ninguna publicación para dejar constancia de todo lo que sabía.

Entre las muchas cualidades de Toño Guerra, un gran amante de la tradición y la cultura, destacó su labor como campanero. Era un gran profesional y conocedor de los distintos toques de campana, y un destacado miembro de la Asociación de Campaneros Zamoranos, con quienes participaba en exhibiciones para dar a conocer esta tradición, que recientemente ha recibido la consideración de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

José Antonio, además, era el responsable de su zona de Cáritas en la Diócesis de León y también perteneció a la Escuela de Folclore de Benavente y los Valles.

En Santa Cristina de la Polvorosa, era una persona muy querida y considerada por todos. En el recuerdo quedarán los grandes belenes que cada año realizaba por Navidad, muchos de cuyos elementos habían sido elaborados por él mismo.

Al finalizar la misa, tomaron la palabra un representante de la Asociación de Campaneros Zamoranos, que dio las gracias en nombre de la asociación “por haber podido compartir con él trabajos, ambiciones y amistad. Hoy las campanas suenan al unísono a fiesta y a muerto. Dios te ha llevado cuando la asociación celebra la fiesta de nuestro patrón San Paulino de Nola y tus compañeros seguro que harán sonar las campanas a fiesta, mientras que sus ojos y el corazón se llenan de lágrimas al recordarte. Le pedimos a Dios que estés presente allí con él y tocando las campanas a Gloria en el cielo”.

También tuvo unas palabras una representante de la Cofradía de la Virgen de los Dolores, de la que José Antonio fue fundador, quien destacó el empeño y ahínco del fallecido para llevar a buen fin la cofradía. “Desde 1990 que estamos inscritos, todo el trabajo que ha hecho está compensado, porque hoy la cofradía está consolidada en Santa Cristina. Quiero prometerle aquí, delante de todos, que la cofradía es él, esa ilusión que tenía y esa responsabilidad de seguir adelante, que la cofradía no va a caer nunca en la vida, siempre trabajaremos por ella como tú lo hiciste, incluso con más entusiasmo para que cada vez tenga más socios. Decirte que te lo agradeceremos toda la vida, que te echaremos mucho de menos todos los días, que no te olvidaremos nunca y muchísimas gracias por todo lo que has dado a Santa Cristina y a todos nosotros, gracias de todo corazón”, dijo con una profunda emoción.

Miembros de la Asociación de Campaneros realizaron los toques de campana de funeral en la iglesia antes del inicio de la misa y también desplazaron su campanario portátil hasta la localidad y acompañaron el féretro desde la iglesia, donde recibió un gran aplauso a su partida, hasta el cementerio para darle el último adiós a quien fue uno de sus miembros más destacados.