La húmeda primavera recupera el maravilloso paseo entre fresnos centenarios en San Pedro de Ceque

Una de las actividades más agradables que puedes realizar en la primavera en los Valles de Benavente es pasear por algunas de las sendas ecológicas que parten de la plaza de San Pedro de Ceque y que se dirigen hacia el bosque llamado El Real. Desde hace cientos de años, este bosque pertenece al municipio de San Pedro como resultado del pago que el pueblo de Uña de Quintana hizo a San Pedro por una imagen religiosa.

Hay pocos entornos naturales donde se encuentren tres tipos de bosques perfectamente diferenciados, como sucede en este emblemático bosque de El Real. En las orillas del arroyo del Regato podemos admirar los centenarios ejemplares de fresnos y todo el sotobosque del bosque de ribera. Muchos de estos fresnos están en claro retroceso y muchos han perecido en los últimos años a causa de la sequía, que este año han esquivado, permitiendo que volvamos a ver sus copas frondosas características de una primavera húmeda que aún permite que el arroyo del Regato mantenga un buen nivel de agua.

En las zonas húmedas alejadas del arroyo principal prosperan los robles, formando pequeños bosques con gran variedad de herbáceas aprovechadas por una ganadería vacuna extensiva.

Quizás lo más atractivo y emblemático de este peculiar paraje de El Real sea el bosque de la zona más alta, poblado de encinas casi milenarias cuyos retorcidos troncos evocan distintas figuras antropomórficas, perceptibles para cualquiera con un poco de imaginación.

Este bosque tan singular bien merece figurar como entorno natural protegido para que muchas generaciones puedan disfrutar de su belleza.