El milagro de las guerreras zamoranas de la Bovedana, un empate en Gijón asegura su permanencia en Tercera División Nacional

Muñoz

Fotos: Merche Muñoz

Tuvimos que esperar hasta el quinto encuentro del 7 de octubre con el Llanera para que el equipo de La Bóveda consiguiera su primer punto. Un punto muy importante porque consiguió marcar un punto y aparte y demostró su progresión empatando a domicilio con el Victoria FC y como local con el Umia gallego, lo que le permitía salir de los puestos de descenso. La derrota como local el 26 de noviembre ante el Real Oviedo F y con las cámaras de Interbenavente como testigos dolió mucho en la afición porque no merecieron perder, pero si algo ha tenido este equipo esta temporada es moral y pundonor para levantarse y consiguió de nuevo mostrar sus credenciales de equipo peleón ante el Sárdoma con un empate y con una gran victoria como local ante el emblemático Sporting de Gijón, remontando dos goles y terminando ganando por 4 a 2. Con el empate con el Victoria CF lograba comer las uvas del nuevo año fuera de los puestos de descenso.

El inicio del nuevo año no sentó muy bien a las guerreras de La Bóveda. Tres derrotas seguidas ante tres equipos punteros de la Tercera FEF como el Olímpico de León, el Friol y el Avilés volvieron a colocar a La Bóveda en puestos de descenso. En la jornada del 11 de febrero y después del empate ante la UD Mos, su entrenador Juanga y todo el equipo técnico presentaron su dimisión, pensaron que el equipo necesitaba un revulsivo y dejaron el puesto a un entrenador burgalés muy curtido en distintos equipos femeninos, Moisés Ichaso. El triunfo a domicilio de la UD Bovedana ante la UD Llanera, y aún cuando el técnico burgalés no se había hecho cargo del equipo, llenó de moral a las jugadoras que encadenaron dos victorias, dos empates y una sola derrota como local ante el Deportivo. Estos resultados consiguieron que se mantuvieran 9 puntos por encima del descenso con 9 puntos en juego. El punto obtenido este sábado ante el Sporting de Gijón certificó su permanencia en este primer grupo de la Tercera División Nacional Femenina.

No sabemos cuál será la trayectoria del equipo Bovedano femenino la siguiente temporada, pero ahora toca celebrar esta permanencia. El equipo de La Bóveda es un ejemplo para el deporte de la España vaciada que a duras penas consigue sobrevivir, pero que es muy importante para mantener viva la vida social de los pueblos y, a la vez, se convierte en un símbolo de resistencia contra la despoblación y el empobrecimiento de los sectores económicos rurales.

Si un equipo pequeño, y con grandes dificultades económicas como la UD Bovedana femenina Caja Rural, ha conseguido el milagro de mantenerse en la categoría nacional, ¿cómo no van a conseguirlo los jóvenes que viven en el entorno rural de Zamora, soñar con progresar en su tierra y seguir disfrutando de nuestros paisajes, vida sana y un gran patrimonio monumental e histórico? ¡Sí se puede!

Fotos: Merche Muñoz