Dulces originales en San Valentín para sorprender a tu pareja

 

Bombones personalizados

 

Los bombones son un clásico de San Valentín, pero puedes darles un toque personal y creativo si los haces tú mismo. Solo necesitas chocolate, moldes y los ingredientes que quieras añadir, como frutos secos, fruta, caramelo, licor, etc. Puedes elegir el tipo de chocolate para repostería que más le guste a tu pareja, ya sea blanco, negro o con leche, y fundirlo al baño maría o en el microondas.

 

A continuación, rellena los moldes con el chocolate y los ingredientes que hayas escogido, y déjalos enfriar en la nevera hasta que se endurezcan. Después, desmolda los bombones y envuélvelos en papel de colores o en una caja bonita. Puedes escribir un mensaje o un nombre en cada bombón con chocolate derretido o con glaseado. Así, tendrás unos bombones personalizados y deliciosos para regalar a tu pareja.

 

 

Galletas con forma de corazón

 

Otra opción fácil y divertida es hacer galletas con forma de corazón y decorarlas a tu gusto. Solo necesitas harina, mantequilla, azúcar, huevo, levadura y sal para hacer la masa de las galletas. Mezcla todos los ingredientes en un bol hasta obtener una masa homogénea y elástica. Luego, estira la masa con un rodillo sobre una superficie enharinada y corta las galletas con un molde con forma de corazón. Coloca las galletas en una bandeja de horno con papel vegetal y hornéalas a 180ºC durante unos 15 minutos o hasta que estén doradas. Deja que se enfríen y decóralas con glaseado, chocolate, sprinkles, fruta, etc. Puedes usar tu imaginación y crear diseños originales y románticos. Por ejemplo, puedes dibujar caras sonrientes, besos, flores, letras, etc. También puedes hacer un agujero en la parte superior de cada galleta y pasar un hilo o una cinta para colgarlas o hacer un collar. Así, tendrás unas galletas con forma de corazón que harán las delicias de tu pareja.

 

 

 

Cupcakes de San Valentín

 

Los cupcakes son unos pastelitos individuales que se pueden rellenar y decorar de muchas formas. Son ideales para regalar en San Valentín, ya que puedes personalizarlos según los gustos y preferencias de tu pareja. Para hacer los cupcakes, necesitas harina, azúcar, mantequilla, huevos, leche, levadura, vainilla y colorante rojo. Todos son ingredientes que puedes encontrar fácilmente en tu tienda de repostería favorita.

 

Para su preparación, bate la mantequilla con el azúcar hasta que quede cremosa. Añade los huevos de uno en uno y sigue batiendo. Incorpora la harina tamizada con la levadura, la leche, la vainilla y el colorante rojo. Mezcla bien hasta obtener una masa lisa y homogénea. Reparte la masa en unos moldes de papel o de silicona y hornéalos a 180ºC durante unos 20 minutos o hasta que al insertar un palillo salga limpio. Deja que se enfríen y rellénalos con lo que más le guste a tu pareja, como mermelada, crema, nutella, etc. Haz un corte en el centro de cada cupcake y rellénalo con una cucharadita del relleno elegido. Luego, decora los cupcakes con una manga pastelera y una boquilla rizada. Puedes usar nata, buttercream, merengue, etc. y teñirlo de rojo o de otros colores. Por último, añade algún detalle como un corazón de azúcar, una fresa, una flor, etc. Así, tendrás unos cupcakes de San Valentín que enamorarán a tu pareja.

 

Estas son solo algunas ideas de dulces originales que puedes hacer en San Valentín para sorprender a tu pareja. Pero lo más importante es que los hagas con amor y cariño, y que los disfrutéis juntos. Recuerda que el día de San Valentín es una excusa para celebrar el amor, pero que el amor se demuestra todos los días del año. ¡Feliz San Valentín!