Las aficiones creativas forman parte cada vez más de nuestra vida cotidiana. Cada vez somos más los que nos dedicamos al bricolaje o a las manualidades, porque llegan al mercado nuevas soluciones, nuevas técnicas y nuevos productos a precios muy asequibles. Uno de estos ejemplos es el punto de cruz con diamantes. ¿Lo has probado alguna vez? Es una actividad sencilla y divertida, con un bonito acabado y sin necesidad de tener ninguna habilidad especial. Sólo necesitas un poco de paciencia y ya está. En un abrir y cerrar de ojos, tendrás una creación hecha por tus propias manitas con un acabado impecable. Entonces, ¿cómo funciona esta actividad?

 

 

Punto de cruz diamante: entre la pintura por números y el bordado en punto de cruz

 

Seguro que has oído hablar de la pintura por números. Es una forma fácil de crear un lienzo pintado a mano digno de un artista. Sólo hay que colorear cada cuadrado numerado con el color que le corresponde. Sencillo, rápido y eficaz.

 

El punto de cruz diamante, comúnmente conocido por su homónimo en inglés “diamond painting”, es el mismo principio, pero menos engorroso y con un acabado único. Todo lo que tienes que hacer para realizar un cuadro diamond painting es colocar diamantes de resina específicos en un lienzo adhesivo según los números indicados para crear tu propia obra de arte. El resultado está garantizado. También recuerda un poco al punto de cruz, con el resultado de tus creaciones un poco pixeladas. Así que no esperes más y pide un kit de diamond painting para probarlo, ¡te engancharás! Puedes obtener tu primer diamond painting pinchando aquí.

 

La otra ventaja de esta afición creativa es que es relajante. Al igual que con el punto de cruz, seguro que encuentras un diseño que te gusta y, punto por punto, verás que esta disciplina te distrae y te hace mucho bien. Puedes hacer el mismo tipo de dibujos que con el punto de cruz. Una cosa es segura, no es necesario saber diamond painting. Es una actividad al alcance de todos, y es fácil conseguir resultados asombrosos.

 

 

 

El fuerte regreso de la tela

 

En los últimos años, hemos asistido a un resurgimiento de algunas de las técnicas más antiguas, como el bordado y el lienzo, que a muchos les encantaban cuando eran niños. Con el lienzo, se cubre la tela con el diseño que se quiere reproducir y lo único que hay que hacer es trazar líneas de hilo. Es un poco como el bordado, pero con hilos de mayor diámetro. Este principio hace que la actividad sea accesible a todo el mundo.

 

Es realmente satisfactorio terminar un lienzo tras largas horas de concentración. Es una actividad que encauza y concentra, puede ser largo y tedioso y, aún así, el tiempo se pasa muy rápido haciéndolo.

 

El diamond painting ofrece las mismas ventajas, pero es más fácil de hacer. Incluso los niños pueden hacerlo, porque es una forma estupenda de trabajar la concentración. Incluso a los niños más activos les encantará.

 

 

 

Bordado con puntada corta

 

 

Este método de bordado en punto de cruz es, con diferencia, el más tedioso. El lienzo está en blanco y hay que contar cada agujero para saber dónde coser... Además, si te equivocas en un cuadrado, puede ser difícil recuperarlo... En comparación, el bordado en rombos ganará la partida.

 

Sin embargo, el resultado del bordado en punto contado es auténtico, y puedes dar rienda suelta a tu imaginación. Con esta actividad, el único límite eres tú. Sin olvidar que seguramente sea necesario dominar la técnica para disfrutar de ella.

 

 

El Diamond Painting puede ser la actividad favorita

 

Como te habrás dado cuenta, el diamond painting es relajante, fácil y, por lo tanto, accesible a todo el mundo. Es una actividad que te permite evadirte del estrés cotidiano y mantener la mente ocupada. Y es perfecto para los adultos que atraviesan periodos de ansiedad o depresión.

 

Todo lo que tienes que hacer es encontrar el modelo que más te guste y que se adapte a tu decoración. También hay que tener en cuenta este aspecto. ¿Qué puedes hacer con tus cuadros diamond painting una vez terminados? Por supuesto, puedes regalárselo a un miembro de tu familia o a un amigo en un cumpleaños, por ejemplo. También puedes quedártelo y encontrar un bonito marco en el que colocar tu obra. Podrás exhibirla con orgullo en tu salón o dormitorio, para conseguir un marco realmente único y sublime.

 

Disfruta experimentando el diamond painting y no dudes en compartir tus bellas creaciones para que puedas descubrir todas las hermosas posibilidades que ofrece.