Los mejores Souvenir para regalar en tu boda, comunión, bautizo o celebración

 

 

La ocasión de celebración de bodas es excepcional. Sorprender a los invitados es, a menudo, una de las situaciones más demandantes en cuanto a obsequios, detalles y objetos para regalar. Aunque los novios sean el eje de la situación, es una obligación siempre que la boda regrese con los invitados no solo en el recuerdo sino en algún souvenir. Por ello, te presentamos las mejores opciones para tu boda.

 

Pero ¿qué es un Souvenir? ¿Por qué es importante? El Souvenir, a diferencia de otros tipos de regalo, tiene un valor simbólico, relacionado íntimamente con un lugar, momento, persona o situación la cual, es sui generis y especial. De modo que, si piensas que tu boda, matrimonio, bautizo, comunión o confirmación tiene que ser único e inolvidable, pues debes incluir algunos buenos Souvenirs como Diamantes de Vidrio, Bomboneras, Rosarios de recuerdo, Dípticos y Portarretratos. Sin embargo, lo fundamental a comprender, y lo explicado en las siguientes líneas, es el significado real de las bodas y la familia en el plan de Dios donde, además, podrás comprender la importancia de evocar proverbios y pasajes con significado ideal para tu boda, bautismo, confirmación o comunión.

 Primeramente, es necesario, tanto para los novios como para el resto, comprender el significado del matrimonio en el plan creador de Dios. En el cual Dios transmite su amor a través de sus hijos y en el matrimonio se manifiesta la sacralidad de ese deseo y voluntad imposibles de resistir para las parejas. Por ello las reflexiones del matrimonio, incluso en una nota, carta o cualquier que sea el Souvenir, deben estar vinculadas a ese sentimiento, evocar el instante preciso en el que Dios consagró su amor a través de sus hijos.

 

“La vocación al matrimonio se inscribe en la naturaleza misma del hombre y de la mujer, según salieron de la mano del Creador. El matrimonio no es una institución puramente humana a pesar de las numerosas variaciones que ha podido sufrir a lo largo de los siglos en las diferentes culturas, estructuras sociales y actitudes espirituales.” (Gaudium et Spes – Juan Pablo II)

 

Como se ha observado, la unión de los conyugues es una ocasión especial y sumamente espiritual. Sin embargo, como anfitriones, los novios quieren compartir esa alegría con sus allegados, amigos, familiares, conocidos, y demás invitados a la boda. En ese caso, los Souvenirs permiten retratar ese deseo inspirado en la espiritualidad del amor de la pareja y compartirlo con sus allegados. No obstante ¿cuál es la mejor forma de que el regalo sea único y trascendente? Es decir, el objetivo del Souvenir es que el evento, consagrado en amor y compromiso, perdure no solo para los novios sino para todo el resto. Por ello, las alternativas deben poder rememorar esa unión.

 

 En el cristianismo las Bodas de Caná son los mejores referentes del amor de pareja ante Dios y todos los presentes. Por ello, una excelente alternativa es encontrar dípticos, pergaminos y cuadros con las Bodas de Caná en Souvenirs de bodas. Tiene su sentido y lógica en cuanto Jesús realizó allí el milagro de la conversión del agua en vino y con él, satisfizo la sed los invitados. Son así las bodas y matrimonios ocasiones especiales para consagrar la naturaleza del amor que Dios otorgó a sus hijos a través del compromiso y que distinguió de los males del hombre “El amor es paciente y bondadoso. El amor envidia ni se jacta de orgullo. No se comporta con rudeza, ni es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor.” (Corintios 13:4-5)

 

Una excelente opción para rememorar las Bodas de Caná de forma duradera son los dípticos, por su tamaño y dimensiones permiten apreciar no solo la imagen sino el mensaje que se le quiera inscribir. Al entender el significado e importancia de las Bodas de Caná, se puede comprender la dimensión de la celebración religiosa.

 

Si las bodas son la conmemoración del amor de Dios en sus hijos, la familia es el fruto de la bendición de ese amor. La procreación de los hijos, para honrar al padre y a su madre son parte del plan divino de Dios para sus hijos. Por ello la familia ocupa un lugar principal en cualquier sociedad, sea o no sea cristiana, Dios a todas las ama y ampara por igual.

 

El retrato de la familia cristiana es el de la Sagrada Familia donde se evoca la comunión del hogar en la Iglesia Doméstica, del Padre, hijo y espíritu santo. María hace su presencia en la casa, como la proveedora del cuidado y amor incondicional que, complementan el trabajo arduo del padre para tener un hogar en el balance de Dios. Los hijos que son la bendición de esa unión en amor honraran a sus padres por lo dado, amado y sentido, es la forma en la que Dios lo quiso “Hijo mío, escucha las correcciones de tu padre y no abandones las enseñanzas de tu madre. Adornarán tu cabeza como una diadema; adornarán tu cuello como un collar.” (Proverbios 1:8-9).

 

El amor de la familia se inmortaliza como un diamante, es el fruto del fuego de las pasiones, positivas y negativas, que, cuando se siguen los pasos de Dios y se honra el hogar, este es inquebrantable y reluciente como el diamante. Por ello, el amor brilla como gema en un hogar bendecido por Dios. Es la alianza de la Sagrada Familia la que tiene su reflejo en cada cara de la gema.

 

“Queridos por Dios con la misma creación, matrimonio y familia están internamente ordenados a realizarse en Cristo y tienen necesidad de su gracia para ser curados de las heridas del pecado y ser devueltos «a su principio», es decir, al conocimiento pleno y a la realización integral del designio de Dios.” (Familiaris Consortio – Juan Pablo II)

 

Es así como, cuando hablamos de Familia Sagrada nos referimos al amor plasmado en los Padres, los hijos y la presencia del espíritu santo en un hogar. Juan Pablo II, se refirió a la unidad necesaria en Cristo para la humanidad durante su papado, es esa la unidad que se pretende encontrar en cada celebración, ocasión especial o conmemoración de eventos.

 

Recuerda que sea cual sea la ocasión para celebrar, se trata de amor. El amor es el producto de Dios en la tierra, en sus hijos, en la fe del matrimonio y la familia que se forma. En las bodas como fiestas se celebra y se piensa en la unión eterna que sucede con el voto y palabra de los esposos. Así, no hay mejor ocasión para que se plasme un díptico o un diamante e incluso un pergamino donde se evoquen imágenes de las Bodas de Caná o la Sagrada Familia. Mientras que, como Souvenir para un bautizo, mudanza o comunión, las Bomboneras siempre tienen un lugar especial, junto a los rosarios y las cajas de regalo.