La Obisparra de Ferreras de Arriba desafía a la COVID-19 y a la lluvia

Desde primeras  horas de la mañana los cuatro personajes típicos de esta Obisparra, la Filandrona , el Diablo, la Madama y el Galán se dieron cita en la plaza del pueblo donde ya les esperaba un grupo folclórico para animar la fiesta y también una mesa con las típicas pastas y orujos para calentar el cuerpo para una jornada festiva y muy larga que se prolongará hasta bien entrada la noche.

Los cuatro personajes comenzaron las típicas carreras por las calles persiguiendo a  la chiquillería, que no cesaba de provocar a nuestros cuatro protagonistas de esta mascarada de invierno que provistos de sus correspondientes correas trataban de pillarlos  y ellos de zafarse para evitar los correspondientes zurriagazos o tiznadas por parte de la Filandorra que siempre recompensan el castigo con un dulce navideño: Esa vieja lucha ancestral entre el bien y el mal o el miedo y la valentía siempre presente en estas fiestas invernales de estos valles de la Sierra de la Culebra.

Estas carreras se compaginan con las visitas a las casa de los vecinos donde reciben dulces y licores además de un pequeño aguinaldo que servirá para financiar la cena que los protagonistas y los mozos y mozas del pueblo disfrutarán al final de la tarde.

Al medio día los cuatro personajes han acudido a la iglesia a pedir la autorización al cura para continuar la fiesta, autorización concedida no sin antes probar el zurriagazo de uno de los protagonistas y del obsequio correspondiente.

De regreso a la plaza, donde sigue el grupo folclórico amenizando la mañana con su música, se producen las últimas carreras y solicitudes de aguinaldo de la mañana entre el nutrido grupo de espectadores que han desafiado esta mañana lluviosa de San Esteban. 

Es hora de reponer fuerzas para continuar a las cuatro de la tarde esta mascarada de la Obisparra de Ferreras de Arriba que ya no se interrumpirá hasta bien entrada la noche donde los “guapos “ (la Madama y el Galán) y los “feos” (la Filandorra y el Diablo) se unirán para disfrutar juntos de una cena que seguro que volverá a repetirse el próximo año aunque deseamos que esta vez sin restricciones de aforo y movilidad.