Las rebajas de la incertidumbre asoladas por el frío y la pandemia

Hablamos con Pilar, su establecimiento de moda femenina Jappa Moda lleva en nuestra ciudad abierto desde hace 28 años y asume con resignación una bajada de ventas en la campaña de invierno de aproximadamente un 40%. La campaña de ventas de Navidad dice que empezó a moverse en la última semana de diciembre y se muestra satisfecha con el resultado. “La temporada tampoco ha estado mal,  hemos comprado menos, tenemos menos ropa y creo que hemos acertado bastante con la compra”, dice.  

Respecto a las rebajas, en Jappa tienen descuentos de hasta el 50%, dice Pilar que siguen en la misma línea de otros años, asegura que no se compran prendas para rebajas y que las colecciones de marcas que ponen a la venta las tienen compradas desde el mes de febrero, “siempre compramos al menos con seis meses de antelación”.

Dice Pilar que para ellas están siendo muy importantes la venta on line y las redes sociales. Están vendiendo su producto fuera de Benavente y para la gente de Benavente es un escaparate, para que la gente lo vea y luego vaya por la tienda a comprarlo. “Si no hubiera sido Internet, lo hubiéramos pasado mal. Internet nos ha ayudado mucho, hay que currárselo, trabajar mucho las redes sociales, que la gente vea cómo queda la prenda puesta es muy importante”.

El nuevo horario del toque de queda no creen que les afecte demasiado, pero sí que dicen que les afecta el cierre de la hostelería, “si los bares están cerrados, se nota mucho, nos bajan las ventas”.

Sus previsiones sencillamente son la incertidumbre. El inicio de las rebajas se ha visto truncado por el tiempo y por el empeoramiento de la pandemia, “no podemos hacer previsiones, si está como el año pasado podremos ir tirando, eso sí,nos tenemos que olvidar del vestido de fiesta”

Desde hace 29 años Imán Moda lleva ofreciendo en Benavente su moda joven. Rocío, su propietaria, dice que este no ha sido precisamente el mejor año de su historia pero que no ha estado mal, en línea con el año anterior. 

“Yo me sorprendo a mí misma, si me hubieras preguntado en abril, te hubiera dicho que era una hecatombe, nadie nos creíamos que íbamos a vender lo que hemos vendido. El verano ha estado bien, yo creo que había más gente que otros años  también ha podido influir que se ha generado una mayor concienciación en consumir en el comercio local”, dice Rocío.

Afrontan la campaña de rebajas con unos descuentos ahora mismo del 20%, reconociendo que este año han comprado “tirando un poco para atrás, por la incertidumbre”. Dice que los primeros días de rebajas han sido en la línea del año pasado, piensa que ha influido más la helada que otra cosa. Con las carreteras heladas, a la gente de la comarca les cuesta venir, “ya les costó también empezar a venir en el verano”, después del confinamiento.

Sobre las nuevas restricciones piensa que no les afecte demasiado, también cree que el cierre de la hostelería les repercute mucho y valora que a pesar de ser algo negativo para el sector porque hay también muchos pequeñas tiendas en los centros comerciales, su cierre y el cierre perimetral de las provincias puede incluso repercutir de forma positiva, pero insiste en que no es la cuestión más deseable porque lo ideal es que estuvieran todos abiertos.

Dice Rocío que en Imán no han querido dar el salto a la venta on line, piensa que no se puede competir con los grandes. Sabe que en algunas ocasiones las tiendas físicas, sobre todo con las marcas conocidas, sirven para que el cliente venga a ver el producto, probárselo y que luego lo compre por Internet en alguna plataforma. “De momento creo que el impacto de esto es mínimo, lo ideal es que te utilicen alguna vez pero que también te conozcan y que de vez en cuando compren. Te sorprendes a veces porque vienen, piensas que han venido solo a probarlo y luego vuelven y realmente lo compran”.

Sus previsiones para el año no son buenas, “esto no tiene pinta de cambiar, pero tenemos que seguir para adelante pase lo que pase”.

Nos recibe José Antonio en Almacenes Imperio, la tercera generación de industriales del textil en Benavente desde que en 1926 su abuelo abriera la primera tienda en el antiguo local de la Campana de Oro en la calle de la Rúa.

No ha sido una buena campaña de invierno para la sección de ropa, dice José Antonio que “la gente no compra porque no tiene ocasiones en las que disfrutar de la ropa nueva para vestir, se opta más por comprar cosas para casa” dice, asegurando que la bajada de ventas respecto al año anterior es de alrededor de un 50%.

Las rebajas tampoco tienen una buena perspectiva para Imperio. “La campaña de rebajas se avecina terroríficamente mala, los primeros días empezó razonable pero ahora con el frío y el empeoramiento de la pandemia que se nos ha venido encima, estas nuevas medidas asustan a la gente y creo que será mucho peor”.

No ve soluciones a corto plazo José Antonio. “La solución es muy mala, no vamos a vender mientras la gente no tenga la libertad de poder salir y poder disfrutar de alicientes para comprar ropa nueva y lucirla. Cuando necesitas alternar o hay acontecimientos se compra más ropa, para dar un paseo y poco más se sigue utilizando la ropa que ya se tiene”, dice.

También en Almacenes Imperio han notado el impacto del cierre de la hostelería, porque implica que la gente tiene menos ocasiones para salir.

Las rebajas en Almacenes Imperio, dice José Antonio que serán más o menos como en años anteriores, los descuentos oscilarán entre el 20% y el 50%. Dice que ahora mismo no es cuestión de incrementar los descuentos porque realmente no hay demanda.  Su previsión para este año es realizar una bajada en las compras y compensar las compras realizadas el año pasado antes de la pandemia.

Su presencia en Internet de momento se limita a las redes sociales. “Tenemos las redes sociales como escaparate pero ahora no se percibe su transformación en venta porque hay ni necesidad ni aliciente para comprar. Esa motivación de estrenar y cambiar de ropa no existe actualmente. Esperemos que a partir de la primavera podamos ver una luz”.