El humor tiene dueño, se llama Santi Rodriguez.

Los buenos profesionales se caracterizan, no sólo por hacer que el público se entretenga con sus obras o monólogos, también juego un facto importante la cercanía con las personas que han hecho que tengan larga vida en el mundo del espectáculo.

Un buen ejemplo es el mostrado ayer por Santi Rodríguez, el famoso frutero de la serie “7 Vidas” que tras una larga gira, su parada en la noche del viernes era Benavente.

Durante dos horas el espectador pudo ser testigo de las vicisitudes que Santi tuvo que soportar para poder llegar a ser una de las figuras relevantes en el panorama cómico de nuestro país, además de sketches sobre la vida en pareja, las vacaciones, lo que significa para la sociedad la palabra “gratis” y sus consecuencias, y la vida adueñada por las nuevas tecnologías.

El publico disfrutó durante toda la representación, no sólo por el gran trabajo del Señor Rodriguez, si no también por ser capaz de empatizar con el público desde el primer segundo hasta el final de su representación cuando estuvo dispuesto a hacerse fotos y atender hasta el último espectador que dejaba el teatro. Muestra de una gran profesionalidad y de saber reconocer que prácticamente el hecho de llegar a ser un referente en su trabajo, en mayor medida, es propiciado por el éxito que le da el público.