Una veintena de pendones partieron desde San Pedro de la Viña hasta el santuario de Rosinos de Vidriales en la romería en honor a la Virgen del Campo
El Santuario de Rosinos de Vidriales celebraba la romería en honor a la Virgen del Campo estrenando un pendón de nueve metros de mástil y un paño damasquinado con franjas de colores blanco y azul celeste, con una superficie de 36 metros cuadrados, que sustuye a uno anterior después de décadas.
La comitiva festiva partió desde el San Pedro de la Viña hasta el Santuario de Rosinos de Vidriales acompañando a esta nueva enseña de la patrona de Vidriales y aportando un espectacular colorio con la presencia de una veintena de pendones, una concentración que no es habitual y que hoy pudieron disfrutar los romeros del valle de Vidriales en la celebración de su patrona.
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